Hace un tiempo, durante las celebración de la Semana Santa de este año, la parroquia en mi barrio organizo un Viacrucis por las calles, algunas familias elaboraron altares muy bonitos en la entrada de sus casas o en sus conjuntos con cada una de las estaciones. Al momento de empezar, el templo estaba casi lleno y entonces empezó a llover; una pequeña dificultad que hizo que apenas unas 50 personas acompañara la ceremonia. De ese tipo son nuestros problemas como cristianos en una ciudad como ésta. Y aunque los colombianos no deberíamos sentirnos ajenos a situaciones más difíciles por ejemplo, las de zonas rurales donde la violencia que vivimos ha atentado contra los templos y las comunidades religiosas; debemos abrir los ojos al mundo.
Hay situaciones mucho más graves, como las que viven los cristianos en Siria o en Iraq donde por razones de su FE muchos cristianos son perseguidos e incluso martirizados, Personas que prefieren dejarlo todo, incluso morir por defender su amor por Jesús. Existe una campaña mundial que pretende solidarizarnos con estos hermanos que se llama ”Yo también soy Cristiano de Iraq” y que busca que todos unidos mediante el poder de la oración y con nuestro testimonio vivo, cambiemos esta realidad tan triste.
La Hermana Siskya Valladares nuestra Gente Pureza de este mes, pasó la navidad con las familias refugiadas en Iraq. Les dejo una entrevista que dio a Radio Ecca de España donde nos cuenta su experiencia. Ojala todo esto nos lleve a preguntarnos si nuestra fe es tan fuerte como para dejarlo todo y arriesgar hasta la vida en su defensa. A preguntarnos si: ¿Yo también soy cristiano como los de Iraq?
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